Mon Guerlain es un homenaje a la feminidad contemporánea: una feminidad fuerte, libre, sensual, inspirada en Angelina Jolie. Este frasco joya, facetado como un diamante, ha sido acabado a mano y decorado con hilo de oro por las "Dames de Table" de los ateliers de Guerlain, en una auténtica muestra de un saber hacer único y ancestral.
Fragancia femenina delicada que rinde tributo a la naturaleza. Su aroma cítrico pone en realce frescura y ternura. El limon verde se inspira en la caipiriña para para representar toda su frescura y femeneidad.
Una chispa en la mirada, una sonrisa intrépida que no teme a nada ni a nadie, un silencio que expresa muchos pensamientos.La mujer insolente es audaz, toma sus propias desiciones y baila en una sintonía diferente. Libre, espontánea, y verdaderamente personal, no se ajusta a estereotipos.
La ciudad de las luces se convierte en una gran pista de baile. La fiesta empieza y el nuevo vestido "bustier" de Guerlain revolotea traviesamente. Una nueva faceta más aireada y divertida… como un vestido al viento!
Fragancia que reencarna el mito del hombre ideal. Para el hombre inteligente, bello y fuerte esta fragancia revelará todo su potencial. Su frasco refleja la elegancia y lujo de este perfume vibrante.
Una fragancia para una mujer joven, romántica, elegante y glamorosa. Una fragancia femenina y audaz que juega con los contrastes. La especiada nota de regaliz se combina con la feminidad de la rosa para producir un aroma original y muy femenino. La fragancia se presenta en un frasco de Mitsouko con sombreado negro, decorado con un Pequeño Vestido Negro.
La primer fragancia amaderada para mujeres. Una versión de la seducción de una mujer que ha encontrado la armonía y el equilibrio, que se transmite principalmente a través de las materias primas de la composición. La botella es de color rojo llamativo, un color sagrado, que evoca a través de la plenitud de su forma de una estatua de una bailarina de Khmer. El tapón se hace eco de la forma del ojo de Buda, en un símbolo de la meditación, que abre el camino hacia el despertar supremo.
Una fragancia para mujeres que se comportan, se mueven y actúan con decisión. El resplandor de una feminidad sorprendente, libre y audaz, totalmente libre... a la que el mundo le pertenece. Da igual si sus elecciones no son las que otros tomarían.
El agua de rosas de Grasse, el aceite esencial de rosas y el absoluto de rosas están rodeados de almendras y notas de cuero. La legendaria botella de corazón invertida adquiere un aspecto negro oscuro intenso. Cuero y tachuelas dan el toque final a este estilo femenino, rock-chick.
El hombre de la vida real no es siempre el hombre ideal pero, afortunadamente, su perfume sí. Extremadamente refinado, se adapta a todas las situaciones. La asociación de una almendra cautivadora con especias y una bergamota refinada ejerce un magnetismo fascinante en este oriental amaderado. Una asociación escoltada por la elegante rosa búlgara, y exaltada a continuación por el incienso y la vainilla tan apreciada por la Casa. La estela, alianza misteriosa y entrañable de notas de cuero, haba tonca y madera de sándalo, se impone por fin.
Sabemos que el hombre ideal no existe pero ahora su fragancia es una realidad. Todo aquello que las mujeres quieren en un hombre lo tiene esta fragancia masculina que se inspira en un hombre carismático, dinámico y leal.
Su botella fue diseñada por Gabriel Guerlain y creada por la casa Baccarat en 1908, siendo una de las botellas icónicas de la Casa Guerlain. Con la fuerza de las líneas y la sensualidad de las curvas, Mon Guerlain evoca una fuerte, libre y sensual feminidad.
Ideal para un hombre masculino, lujoso y elegante. Un frasco cuadrado y facetado, de líneas limpias y con las caras laterales lacadas en azul marino mate. La etiqueta, con detalles rojos, aporta un toque de vigor y dinamismo y su pesado tapón también mate, definitivamente masculino.
Bergamota de Calabria es una esencia viva y luminosa. Es como pasear por los jardines de la bergamota de Calabria o recolectar sus frutos bañados por el sol.